Las empresas se han dado cuenta de que es fundamental atraerlo para diferenciarse de su competencia. Motivar a los colaboradores y también retener el que tengan. Por eso hemos enumerado diez acciones que ponen en marcha las empresas para retener ese talento.
1. Ascensos.
No hay mayor reconocimiento en el ámbito de tu profesión que un ascenso, también en lo que al talento se refiere. Si en la empresa hay alguien con talento, parece lógico que esa persona asuma más o nuevas responsabilidades para que así desarrolle aún más sus cualidades.
2. Aumento de sueldo.
Y obviamente, el ascenso va acompañado de un aumento de sueldo. El reconocimiento económico es otro de los métodos que tienen las empresas para retener el talento y para premiar a aquellos que se lo merecen.
3. Reconocimiento público.
Parece obvio que a muchas empresas por sus resultados les resulta más difícil hacer un reconocimiento económico a sus talentos o por motivos de organización también un ascenso. Así, las hay que deciden premiar públicamente a sus talentos mediante reconocimientos ante el resto de trabajadores: galardones, referencias, en reuniones… Todo vale para dejar claro ante toda la empresa que un trabajador en concreto tiene talento y todos deben saberlo ya que además es un ejemplo a seguir.
4. Nuevos proyectos.
Otra de las formas de retener talento es asignando nuevos proyectos a esos trabajadores. Han de ser proyectos importantes y por supuesto han de tener cierta libertad para llevarlos a cabo. Con esto se consigue (además de los beneficios que un nuevo proyecto pueda tener para la empresa) que el trabajador con talento se sienta importante.
5. Cláusulas en los contratos.
Otra forma de retener el talento es que cuando una empresa ‘ficha’ a alguien con talento, en el contrato se incluyan cláusulas para evitar que se marche o que otra empresa se lo lleve. Se trata de un método menos elegante que los demás pero que existe y es posible.
6. Conciliación.
El talento ha de estar a gusto en la empresa y para eso ha de tener una vida personal y familiar plena y satisfactoria. En una empresa en la que un trabajador con talento no pueda desconectar y estar con su familia terminarán pasando una de estas dos cosas: que el talento se marchita o que se va.
7. Ofrecer posibilidades de crecimiento profesional.
Al igual que no puedes ponerle puertas al campo, al talento no puedes encerrarle en una jaula. Tiene tendencia a desarrollarse, no se le puede cortar sus alas. Así, es necesario que se le ofrezcan garantías de que no va a quedar estancado y de que tendrá la posibilidad de progresar.
8. Incentivos personalizados.
Además de poder ascenderle o subirle el sueldo, otro de los métodos de motivación es el de los incentivos personalizados. Es decir, premiar con algo en concreto la consecución de unos objetivos (un plus económico u otro tipo de premio más inmaterial).
9. Potenciar con formación.
El talento hay que ‘regarlo’, y nada mejor que la formación para ello. Las empresas muchas veces invierten en ello porque saben que luego tiene retorno. A los trabajadores con talento es necesario formarles más aún o reforzarles más, y eso se hace pagándoles esa formación y poniéndosela fácil, compatible con el trabajo sin que eso supongan más horas. La formación pagada es muy valorada entre los trabajadores.
10. Propiciar un buen clima laboral.
Por último, y no menos importante por ello, es que los responsables de la empresa han de promover un buen ambiente en el trabajo para que los empleados estén lo más a gusto posible. Se trata de una cuestión que debe resolver el jefe pero que es básica para que nadie piense en irse de la empresa.